Realización y el arte de tomar conciencia de la luz



Eres la Luz, eres la esencia de todo cuanto existe. Lo que existe, está ahí porque tú, como luz, lo iluminas. La Luz es puro potencial, como lo que sabemos de la energía. En ello, en su potencial, están todos los atributos necesarios para que las formas se manifiesten, elementos iluminados ante la Luz, y que han nacido de la Luz, por así decirlo.

Eres la Luz, pero en este momento supones que eres una identidad. La Luz es conciencia, y has adquirido una conciencia de ti mismo como identidad. Nunca serás más luz o menos luz, más conciencia o menos conciencia. Lo que sucede es que no lo sabes, no lo has verificado, no has "tomado" conciencia de ello. Tomar conciencia de tu esencial naturaleza es un arte.

En este arte de tomar conciencia de la luz, se procede como con la maestría en cualquier hacer. Primero te das tropezones hasta que poco a poco vas fluyendo en este hacer. Hacer en este caso es esta toma de conciencia de tu propia realidad, como ser, como existencia.

La realidad vista en toda su pureza, puede ser como una luz cegadora ante los ojos que venían acostumbrados a la oscuridad, (y esto es un símil)... por lo que es preciso ir acostumbrándose a la luz menor, a la claridad, a la comprensión. Hay muchos relatos de quienes dicen que un día despertaron a la realidad, y luego pasaron muchos años necesitando revisar los modos de entenderlo.

Entonces la cuestión es... en el proceso de investigación espiritual, no vamos siendo más o mejores Ser, pues el Ser no requiere subir o bajar, ampliar o reducir.... pero sí, el tiempo es la gracia que permite que la luz pueda ver su propio reflejo, llegado el día, o momento mejor dicho, preciso y perfecto para ello. Y que además, se produzca la comprensión de la revelación vivenciada, de modo que ya no haya retroceso ni complicaciones... este arte se vuelve una maestría.

Maria Luisa

Sacado del Foro - Conciencia Esencial

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